25 May Familia Narváez – Marquez
Lugar de residencia: Penonomé
Panamá, Rep. De Panamá
La niña nació con un orificio en el intestino, nos enviaron al Hospital del Niño llegamos en una ambulancia. La niña nació por parto normal, en el Hospital de Penonomé al segundo día nos dieron de alta (la niña lloraba constantemente), nos decían que eran gases y la niña presentaba llantos incontrolables. En Aguadulce estuvo hospitalizada el 20/07/2015, pero no contaban con equipos especiales.
La trasladan en ambulancia, perdió los signos vitales y luego fue reanimada con ayuda de los paramédicos. El 21/07/2015 de urgencias pediátricas la trasladan a neonatología para operación de emergencia (gastrointestinales), los médicos no nos daban posibilidad de que la bebe sobreviviera a esa operación le quitaron 60 centímetros de intestino, le quedaron 40 centímetros de intestino. El medico nos dijo que mínimo de 3 a 4 meses de recuperación.
Separamos un Hotel de la localidad, tenía un costo de 30 balboas por día, pagábamos la comida en el restaurante, trajimos dos mudas de ropa. Ya pensábamos como haríamos porque en pocos días no tendríamos como pagar la estancia en el hotel.
La Dra. Eukaris González (neonatología), nos preguntó cómo hacíamos para quedarnos y cubrir los gastos de estadías tan prolongados que iba a pasar la niña. Nos oriento acerca de los albergues de panamá y nos recomendó la Casa Ronald McDonald de Panamá un albergue que si acepta a la familia. Jamás nos imaginamos que nos podrían ayudar de esta manera con el hospeda, la alimentación ¨fue una gran bendición¨.
Pensábamos que íbamos a compartir una habitación con muchas familias y un solo baño para todos ¨jamás nos imaginamos que había un lugar tan maravilloso, limpio, agradable, que ofrece una comida, no pensábamos tener tantos beneficios juntos, la atención es sorprendente es como si pagáramos por el excelente servicio que nos brindan todas las personas de la Casa Ronald.
Por un momento nos preguntamos ¿Que vamos hacer? ¿Dónde nos vamos a quedar? , no nos imaginamos que íbamos a recibir tantas atenciones.
Nos quitaron un peso de encima, preocupaciones, estrés por la economía, al llegar a la casa Ronald es un respiro.
Agradecemos a todo el personal de la Casa Ronald, por recibirnos, por no decir ¨NO¨ a nada gracias a su recibimiento, igualmente agradecemos a las familias por motivarnos a seguir adelante.