Familia González Alveo

Penonomé

En primer lugar, agradecidos con Dios y además con la Casa Ronald McDonald, por abrirnos las puertas en los momentos más difíciles que atravesamos con nuestra hija, diagnosticada con hidrocefalia.

Pidiéndole a Dios que siga bendiciéndoles por todos por todas las cosas buenas que hacen con las familias que necesitan un lugar donde descansar como la Casa Ronald McDonald.

Que Dios le siga bendiciendo.